La exposición temporal de la Orden Real de la Dama, inaugurada en el Centro Cultural Las Clarisas de Elche, ofreció un recorrido por la historia y el legado de esta institución. En el diseño expositivo se buscaba plasmar la esencia y el simbolismo de la orden. La muestra, compuesta por unas 300 reproducciones en miniatura de la Dama de Elche, fue dispuesta en una retícula que no sólo servía como soporte visual, sino que también integraba documentos originales, creando un «mar de damas» que cubría una mesa expositiva de casi 5 metros, eje central de la exposición.

El diseño destacó por su capacidad para fusionar lo histórico con lo visualmente impactante. La disposición cuidadosa de las miniaturas y las piezas históricas en el espacio permitió a los visitantes una inmersión profunda en el simbolismo de la Dama de Elche y la Orden que lleva su nombre. Además, la exposición integró elementos tecnológicos, como contenidos accesibles a través de códigos QR, lo que facilitó un recorrido interactivo y accesible.

La muestra no se limitó a las reproducciones en miniatura; incluyó una variedad de obras, como esculturas, cuadros, un traje original de la Dama viviente y documentos históricos, como las cartas enviadas a personalidades a quienes se otorgó la medalla conmemorativa de la Orden, incluyendo respuestas de figuras como Francisco Franco o Gregorio Marañón. Este enfoque multifacético permitió explorar tanto el origen de la Orden como su impacto y proyección a lo largo del tiempo.

El espacio de Las Clarisas, cuidadosamente elegido por su adecuación a la temática, contribuyó a la atmósfera evocadora de la exposición. Destaca la integración del diseño expositivo con el entorno, respetando y realzando la arquitectura del lugar. La exposición ofreció una oportunidad única para conocer en profundidad la historia de la Orden Real de la Dama y su influencia en la difusión de la cultura ilicitana.